Campiña Segoviana, mudéjar y ruta jacobea. El Camino de Santiago que viene desde Madrid y cruza la provincia de Segovia atravesando la Campiña Segoviana uniendo así Santa María la Real de Nieva con Coca. El monasterio de la primera localidad citada sobresale por su claustro románico protogótico, así como por su iglesia de la Soterraña, del mismo estilo, con portada plenamente gótica. En su restauración se han encontrado pinturas mudéjares y góticas y multitud de frisos. Sus retablos barrocos son valiosos, y no dejes de pasear por su Salón de Cortes y el Refectorio de los Frailes. Por otra parte, hay dibujos neolíticos en los parajes de Fuente Buena y Peñas de Ochando. Dentro de su municipio te voy a destacar la emita gótico-mudéjar y el menhir de Balisa, la parroquia gótica y el palacio renacentista de Hoyuelos, la iglesias gótico-herreriana y palacio renacentista de Paradinas (donde también hay magníficos mosaicos romanos y un Centro de Interpretación Histórica), la ermita románica y el museo etnográfico de Villoslada.
Siguiendo el Camino de Santiago llegamos a Nieva, donde hay vinos de la Denominación de Origen Rueda y uno de los mejores templos mudéjares de Segovia, dedicado a San Esteban, así como edificios rústicos de pizarra y un buen pinar. Si nos desviamos un poco a la derecha llegamos al yacimiento de arte rupestre del Cerro de San Isidro en Domingo García. Cerquita quedan los restos de la fortificación tardorromana del Cerro del Castillo en Bernardos. Continuando por la ruta jacobea llegamos a Nava de la Asunción en donde destaca la Casa del Caño (s. XVIII) y la herreriana Fuente del Obispo.
Ya en Coca vas a encontrarte con un legado arqueológico y artístico de primera magnitud: verracos prehistóricos, frescos romanos, torres románicas, la mole gótico-mudéjar de su castillo, el más puro de los renacimientos en los sepulcros de la familia. Yo voy a hacerte hincapié especialmente en la fortaleza. Obra cumbre de la arquitectura militar mudéjar y gótica, el castillo de Coca se presenta al viajero como una impresionante mole de ladrillo, protegida por un potente foso que supera la veintena de metros de profundidad. Iniciadas las obras en los años finales del siglo XV, una vez instalada la influyente, dentro de la Corte Castellana, Familia Fonseca, se culminarán en los primeros años del siglo XVI. Y tras la visita a la villa, degusta su variada gastronomía. Destaca Coca por su buen comer, típico en asados, morcilla de calducho y mondejo en salsa, así como exquisitas son sus empiñonadas, tortas de chicharrón, rosquillas de palo y sus embutidos y jamones.
Te diré, por último, que entre Coca y Olmedo (Valladolid) hay un buen número de lagunas. En el municipio de Coca destaca, por ejemplo, la Laguna del Caballo de Alba en Villeguillo, por su interés ecológico. Asimismo en Villagonzalo de Coca tienes varias lagunas y camino de Bermuy de Coca está la Laguna de Fuente Miñor.
Y puestos a recorrer un poco más la Campiña Segoviana, baja un poco hacia el sur para contemplar el Palacio del Cardenal Espinosa con su patio renacentista en Martín Muñoz de las Posadas. Disfruta igualmente de paseos por los pueblos del interior, como Sangarcía, Juarros de Riomoros, Montejo de Arévalo o Armuña permite comprobar la diversidad en la arquitectura popular que pasa del estilo mudéjar al empleo de la característica pizarra, tan abundante en la Campiña y tan diferente de otras por sus tonos marrones y ocres.
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